Mantener la piscina de tu comunidad limpia y en estado óptimo puede suponer un quebradero de cabeza, sin embargo, siguiendo estos consejos conseguirás disfrutar de una piscina saludable sin apenas esfuerzos. ¡Es el momento de ponerla en perfectas condiciones!
En primer lugar, debes equiparte: herramientas de limpieza (recogehojas con bolsa, limpiafondos, esponja y recogehojas plano); desinfectantes (cloro, oxígeno activo y bromo); reguladores del PH y productos complementarios (desincrustante, floculante, alguicida y anticalcáreo).
Nada más comenzar la temporada estival debes comprobar el estado general de la piscina: grietas, funcionamiento del motor y accesorios. Si se ha producido alguna rotura puedes usar epóxido, que es perfecto para lograr adherencia y resistencia en contacto con el agua.
También hay que limpiar las paredes y el fondo, y comprobar los niveles de PH y desinfectante. Es recomendable aplicar un filtrado durante al menos 24 horas antes de estrenar temporada. Debes saber que nunca hay que usar jabón para limpiar nada en la piscina ya que reacciona con el cloro y esto supondría un riesgo para la salud.
La depuradora ha de estar en perfecto estado para que aguante todo el verano; por ello hay que revisar la bomba y los filtros de arena. Recoge los cabellos, pelusa y suciedad que se acumulan en la bomba cada dos o tres días como mucho. Además, la limpieza de los filtros es fundamental para permitir que el agua se mantenga en buen estado.
Durante su etapa de uso dos o tres veces por semana tienes que comprobar los niveles químicos de tu piscina, vaciar y limpiar la cesta del skimmer, comprobar los niveles de cloro y asegurarte de que se reparten correctamente por toda la piscina.
El nivel de cloro en la piscina debe oscilar entre 1 y 1,4 partes por millón. Es aconsejable duplicar la cantidad de cloro cuando la piscina se expone a agresiones como el tránsito de mucha gente o la lluvia.
Estos son los parámetros básicos para saber si el sostenimiento de nuestra piscina es el adecuado:
- pH del agua entre 7,2 y 7,6.
- Dureza total de 200 a 400 mg/l.
- Alcalinidad de 80 a 150 mg/l.
El agua perfecta de tu piscina es imprescindible para disfrutar con todas garantías de tus baños veraniegos. Con la utilización de los productos correctos en las proporciones adecuadas y con la ayuda de la depuradora, gozaremos de un agua cristalina y libre de todo tipo de microorganismos.